Un té con mi abuela

Habia invitado a Kie por un té al comedor, llevaba conmigo a Tsutomu en un brazo y un craneo en el otro, nos sentamos y coloque en la mesa estos a quienes presente -Tsutomu es mi marioneta- señale al muñeco y este mismo respondió -Hola linda muñeca- rei un poco y despues señalé el craneo -Ella es mi abuela, bueno casi es mi abuela, estaba muy comoda dentro del ataud, y lo unico que quiso venir fue esto- solté una sonora carcajada, arreglando los pocos cabellos que le quedaban al craneo, mirando al chico -de que pediras tu té?- Esperaba su respuesta, en uno de los pocos momentos de elocuencia que me sucedian.

Luego de una larga insistencia finalmente pude conseguir que Jack me invitara mi tan esperado té, por lo que acudí a su llamado con lo podría llamarse "entusiasmo". Lo acompañe al comedor y me senté donde él me indicaba con una gran sonrisa en los labios, quedando justo de frente.
Mire con curiosidad a sus dos acompañantes esperando a que me los presentara, lo cual no tardo mucho en hacer.
-Mucho gusto Tsutomu- respondí inclinando un poco la cabeza como saludo.
-Muy buenas noches señora- salude repitiendo el gesto anterior pero sin recibir respuesta alguna de su parte; me quede mirándola por un momento pero sin resultado, ante lo cual hice un puchero no muy satisfecho.
Voltee a ver a Jack ya que no pude lograr que me respondiera. -Ummh... - la pregunta me había tomado por sorpresa. -¡Té de limón! pero con mucho azúcar- dije finalmente con bastante determinación.
-¿Qué te servirás tú?- pregunte a Jack antes de continuar con Tsutomu -¿Y tú?-

Reí por su puchero al no recibir respuesta -no creo que pueda contestarte si no tiene lengua- abrí la boca del craneo para mostrarle, echandome a reir a carcajadas sin razon aparente, despues de un rato me calmé y contesté a su pregunta -ambos tomaremos té negro y un pastel de calabaza- casi grité con euforia -no pediras uno tambien? porque si no lo haces tendré que pedirlo por ti, y tienes que ser una bueno y mona muñeca y comertelo todo- le decia mirandolo atentamente y con una sonrisa, -Dios! Jack estas loco, deberias estar encerrado tu y no ellos- me decia Tsutomu, yo lo miré y le dije -Eso no te incumbe, ademas es genial aqui, es muy divertido e interesante verdad Kie?- dirigiendo mi mirada despues hacia mi abuela -se ha dormido, pero me dijo que le parecias una muñeca muy linda- susurre y despues con mas entusiasmo agregué -entonces? de que será tu pastel? de que? de que?- termine esperando que me respondiera para mandar pedir la comida, extrañamente me hacia sacar mi lado infantil que habia olvidado hace un tiempo y que al menos ese dia no planeaba dejar de ser infantil, a menos que el juego requiriera otras actitudes.

Me quede mirándolo por un momento sin comprender bien de lo que hablaba. -¿En serio?- ladee leve la cabeza antes de girarme un poco para ver lo que quería mostrarme, me quede viendo a la señora algo sorprendido al notar que lo que me decía era cierto y luego volví a mirar Jack al oír que se reía, aunque me fue imposible adivinar por qué.

Me aleje un poco cuando este comenzó a gritarme puesto que me ponía algo nervioso, no sabía por qué quería con tanto entusiasmo que pidiera un postre también, pero puesto que se trataba de la hora del té no me pareció una mala idea.
Mire a Tsutomu un poco confundido. -¿Encerrado?- acaso yo... ¿lo estaba? no lo había considerado, pero realmente no sabía si era así o no; me voltee otra vez hacía Jack al escuchar que me estaba preguntando algo. -Si, ¡es divertido!- sonreí al terminar la afirmación aunque aún con ciertas dudas. -También es divertido que Jack este aquí.- añadí volviendo a recobrar mi cercanía.

Sonreí más ampliamente ante el comentario de la señora que comenzaba a parecerme más agradable, quedándome un poco pensativo ante la nueva pregunta que Jack me hacía. -De calabaza también.- conteste aún algo titubeante puesto que nunca lo había probado, pero me causaba curiosidad conocer su sabor.

Lo miraba sonriente, acariciando los pocos cabellos del craneo de mi abuela -de acuerdo entonces pidamos- toqué una campanilla que estaba por ahi cerca, y se acerco una persona, que podria llamarse de servicio aunque su aspecto no luciera tan servicial, porque su mirada estaba casi perdida en la nada, y tenia un atuendo lindamente creado por mi, compuesto de una mezcla de maid y bufon, ordene el té y los pasteles, haciendo que se retirara y volviera rapidamente con las cosas miré a Kie y acerqué un poco de pastel a su boca, ya que vi que habia titubeado hace un momento -Abre asi ahhh- abri mi boca grande para que imtiara el movimiento -te gustará, no esta envenenado, o eso creo- bromee y comence a reir para despues yo tambien comenzar a comer -De verdad que es muy divertido estar aqui, aunque podriamos hacerlo mejor no crees?- me acerqué mucho más a su rostro volviendo a darle pastel en la boca -los juguetes que se terminan su comida, al final reciben un premio- susurre en su oido al tiempo que lamia su sien y tiraba muy suave con mis dientes de su lobulo, para volver a mi asiento y mirarle con una sonrisa pícara en mi rostro

No tardaron en venir a tomar nuestro pedido así como tampoco en traerlo, el aspecto de la camarera se me hizo de lo más curioso pero había algo en ella que me pareció adorable, aunque bien podría decirse que carecía de la servicialidad que se espera de su trabajo.
Me sorprendió un poco que Jack acercase el pastel a mi boca, lo mire algo confundido antes de sonreír al comprender lo que intentaba hacer.
-Ahhhh...- repetí lo que él acababa de hacer, disfrutando del sabor del pastel en mi boca, que para mi sorpresa era mejor de lo que su nombre indicaba. Asentí a lo que me decía mientras introducía los cubitos de azúcar en el té, uno por uno, sin importar que comenzara a derramarse sobre la mesa.

-¿Podemos?- pregunte ladeando un poco la cabeza, abriendo la boca nuevamente para que me de más pastel de comer. Escuche con atención lo que decía mientras lo masticaba.
Me estremecí un poco al sentir su aliento en mi oreja para luego quejarme leve al sentirle tironeándola. -Un premio...- me quede mirando como me sonreía por un momento, para luego sonreír ampliamente. -¡Entonces quiero mi premio Jack!- dije antes de introducir algo más de pastel en mi boca mientras continuaba mirándolo fijo.