Habitacion 0103

Kie & Kaie

Finalmente después de escabullirse entre los pasillos llegamos a la habitación.

-realmente fue un recorrido divertido ¿no crees?- lo despeine un poco y me quede al lado de la puerta no quería entrar primero.

-Abre tu- susurre aun escondiéndome de todos.

Tuve que hacer un gran esfuerzo para mantenerme callado durante el trayecto por los pasillos, el recorrido fue más corto pero más extenuante debido a lo difícil que resultaba el intentar no reírme.

Asentí riendo al fin un poco y luego la sentí jugueteando con mi cabello. Se quedo parada junto a la puerta y me susurro para que abriera.

-¡Ok! - me acerque más a la puerta y pose mi mano sobre el picaporte girándolo, a pesar de que compartía la habitación con alguien más la puerta siempre estaba abierta. La empuje leve y esta se abrió lo suficiente como para permitirnos entrar. Dí un par de pasos dentro de la habitación y le hice un gesto para que también entrara.

Entre a su habitación que estaba muy oscura, me puse tras de el y espere a que cerrara. -Esta muy oscuro ¿no? - susurre en su oído, no era un lugar muy desagradable de hecho me sentía mejor aquí que en mi cuarto.

Tome su cintura con delicadeza y le di vuelta, lo abrace y no te que su corazón latía rápido, el mio igual lo hacia.

-Nunca me había divertido tanto- dije con una gran sonrisa en el rostro, me acerque aun mas y bese muy suavemente sus labios de forma casi imperceptible

-Disculpa espero no haberte molestado- me senté en la cama sonrojada esperando que no se enojara conmigo

Una vez ella estuvo dentro de la habitación también cerré suavemente la puerta, a pesar de ello esta crujió bastante probablemente debido a lo podrida que la madera estaba.

Reí un poco por su pregunta. -Es mejor si se queda así- la habitación era mucho menos aterradora sumida en la incertidumbre de la oscuridad, de esa forma no podía ver claramente la mayor parte de ella, podía imaginar que no era como sabia realmente que era.

La sentí sujetando mi cintura y luego abrazándome, rodee su cuello con mis brazos abrazándola también. Mire directamente su rostro cuando me hablo otra vez, verla sonreír de esa manera me hacía muy feliz. Me sorprendí al sentir el leve contacto de sus labios sobre los míos, luego se aparto, parecía apenada.

La mire otra vez, estaba sentada sobre una de las camas, me acerque a ella y apoye suavemente mi frente contra la suya sonriendole.

Sonreí un poco cuando sentí que se acerco me arme de valor y le dije en tono bajo

-Eres muy lindo, creo que nadie aquí me había hecho sentir así antes-

Lo acerque un poco mas apoyando mi mano en su nuca, cerré los ojos y sentí su respiración, en ese momento no sabia que hacer el me gustaba pero ... y si yo a el no

-Es una linda noche ¿no?

La vi sonreír otra vez y casi como en un susurro hablarme, inmediatamente comencé a sentirme nervioso como muy pocas veces había pasado. Me aterraba la idea de hacerle daño, siendo tan amable, tan cálida... ella que me trataba como nadie lo había hecho.

-... Te quiero... - susurre temblando un poco. Nunca había tenido inconveniente alguno en acostarme con quien lo quisiera, entonces ¿qué es lo que me daba miedo? Que fuera mujer... o que creía que de verdad me quería... tal vez ninguna, no lo sabía.

-Muy linda- sonreí intentando olvidar lo confundido que estaba.

En ese momento, sentí que esperaba algo mas pero yo nunca me atrevería a tocarlo... ni dejar que el me tocara.

-Yo también te quiero-

No lo pude evitar lo bese de nuevo, lo sentia temblar y yo también estaba temblando una parte de mi no tenia ni idea de que hacia

Permanecí así un momento más, tan solo mirandola, no sabía si sería buena idea tocarla o si quería que lo hiciera. Me daba un poco de miedo intentarlo...

Me alegro oírla decir que me quería también, de alguna manera me dio un poco más de tranquilidad, a pesar de ello continuaba temblando un poco.

Al sentir nuevamente sus labios apoye mi mano sobre su pecho, apretando un poco su ropa.

- ¿no quieres que te bese?- pregunte al sentir su mano apretándome, en ese momento estaba algo confundida no sabia que hacer, lo mire a los ojos y acaricie su rostro

Negue con la cabeza. -No es eso... - no quería que creyera eso, pero no sabia que decirle, ni yo tenía muy claro porque lo hacía.

-Es solo que yo... - hice una pequeña pausa y baje la mirada, me sentía bastante apenado -... nunca había hecho esto con una mujer... asi que...- le confese ya más que apenado, sentía mis mejillas arder un poco.

aaaa es eso se apena - bueno te confesare que yo no eh besado a muchos hombres ni mujeres- intenta recordar si lo había hecho antes

-entonces no quieres seguir- se pone de todos colores

Levante un poco la vista al oírla confesarse también, por una parte me aliviaba un poco, por otra me inquietaba decepcionarla.

Asentí despacio y la empuje con cuidado recostándola sobre la cama, para luego sentarme poniendo mis piernas alrededor de sus caderas, inclinándome un poco para que mi rostro quedara frente al suyo.

En ese momento no sabia que hacer yo nunca pretendí que pasara esto pero realmente lo quería.

Lo vi fijamente a los ojos -Estas seguro que esto es lo que quieres-

Respire profundamente ahora tenia que tomar una decisión, no sabia si yo quería seguir. Puse mis manos en su rostro y acaricie suavemente su mejilla -Te quiero- susurre y lo acerque un poco mas a mi

Me quede mirándola fijamente por un momento y luego ella también me miro, si era lo que ella deseaba estaba dispuesto a intentar dárselo. Volví a asentir despacio, aunque supuse que aún no debía parecer muy convencido.

La quería, tal vez no de la forma que ella a mi... nunca había amado a nadie y no sabía si realmente podría hacerlo alguna vez, pensar en eso me frustraba. Ya un poco más cerca bese suavemente sus labios, cerré los ojos... sentía un frió líquido escurrir por mis mejillas.

Lo sentí besarme y sentí una presión fuerte en mi pecho, después sentí algo que caía en mi rostro, levante la mirada y sentí su mejilla.

-Espera esto no debería de ser así- me levante y lo empuje un poco hasta que quedara recostado en la cama, lo abrace muy fuerte.

Mi cabeza dolía esto no era lo que quería, no quería hacerle daño, acurruque mi cabeza en su pecho y simplemente espere a que se calmara

El beso fue bastante breve, al volver a abrir los ojos ella me miraba y tocaba mi húmeda mejilla.

Me dijo unas palabras y me empujo un poco para que fuera yo quien quedara recostado sobre la cama, luego me abrazó y acomodo su cabeza sobre mi pecho.

Me sentía cada vez peor, por más que frotaba mis ojos intentando limpiarlos, volvían a empaparse, aspire algo más de aire y en tono bajo susurre. -Lo siento mucho... -

Me diriji a su rostro y acerque su cabeza a mi pecho -No tienes nada de que disculparte- bese su frente

-No quiero que llores- Lo abrase tan fuerte como pude sin lastimarlo, -si tu no me quieres por ser una mujer lo entenderé-

En ese momento sentí que mi corazón dejaba de latir y regresaba a mi todo el dolor de el pasado, nunca debí pensaba

Frote un poco más mis ojos, comenzaban a arderme, la sentí empujar mi cabeza hasta su pecho y luego besar mi frente.

Me abrazó fuerte otra vez, parecía triste... y era mi culpa. Negué con la cabeza. -Si te quiero... pero yo... no se si puedo hacerlo.-

-Yo no quiero hacer... bueno no quiero- se sonroja -No quiero estar contigo de la forma que creo te estas imaginando tal vez fue muy pronto para besarte me disculpo-

Lo solté y lo aleje un poco de mi, busque en mi ropa mi pañuelo y limpie sus ojos, -pero ya no llores ¿si?-

Ella seco mis ojos y baje un poco la mirada, asintiendo despacio. Era tan dulce... y yo como siempre igual que un niño, dependiendo del consuelo de los demás. Soy un fracaso...

-Yo... lo lamento, de verdad. No sirvo.- levante un poco la vista y sonreí, una sonrisa triste tal vez, al menos mis ojos se mantuvieron secos.

-¿Por que dices eso?- lo mira fijamente y abraza

-Por que no tocas tu violín para mi ¿sip? ammm tal vez hoy no era un buen dia para ninguno de los dos pero bueno todo se compone con la música

No quería responder a su pregunta, me miró fijo por un momento pero me mantuve callado, luego me abrazo y la abrace también, suavemente sin apretarla demasiado.

Asentí algo más animado. -¡Sip!- la apreté un poco más fuerte, bese su mejilla y me separe de ella para ir en búsqueda de Violín-tan que desde hace rato me esperaba.

Me acomode en la cama mientras buscaba su violin -Tengo muchas ganas de escucharte- jugué un poco con mis pies mientras esperaba

Todo se arreglara de eso estaba segura

No había muchos muebles por donde buscar, además de las dos camas solo un pequeño escritorio con algunos cajones y una repisa. Siempre guardaba a Violín-tan en su estuche y la ponía sobre la repisa. Al dirigirme allí la encontré dentro del estuche un poco empolvado y reprochándome por haberla dejado sola tanto tiempo.

Me disculpe con ella y la saque del estuche con cuidado, para luego dirigirme a donde Kanon-chan me esperaba.